16 febrero, 2016

¿Qué es un/a intérprete del Patrimonio?. Toda persona que se dedique a realizar visitas guiadas no es necesariamente un/a intérprete del Patrimonio.


 Todo y toda profesional que se dedique a realizar visitas guiadas, ya sea en espacios naturales como en sitios históricos o museos, no es necesariamente un/a interprete del Patrimonio.  Por lo general, y actualmente en España, se está teniendo una idea confusa e incompleta de lo que es esta profesión. Por ello he decidido escribir este breve artículo con la intención de aportar claridad sobre este concepto.

¿Entonces?, ¿qué es un/a intérprete del Patrimonio?

Es el o la profesional que además de realizar itinerarios interpretativos guiados aplicando la metodología y  técnicas propias de la Interpretación del Patrimonio como guía intérprete se dedica al diseño y planificación de productos interpretativos velando por su buena práctica. 

La Interpretación del Patrimonio es una disciplina con un cuerpo teórico en continua actualización para responder a las emergentes necesidades de la sociedad en continuo cambio,  y  cuyo origen histórico ahonda en la primera mitad del siglo XX con autores relevantes como; Freeman Tilden (1883 - 1980),  William J. Lewis, Grant Sharpe, Sam H. Ham, Jorge Morales Miranda, Francisco “Nutri” Guerra y David Larsen[1] entre otros/as. Y cuya institución de referencia es el National Park Service de EE.UU.


La Gioconda, Museo del Louvre. 2013.

¿Qué  beneficios proporciona la aplicación de las técnicas de la Interpretación del Patrimonio?

Los beneficios de aplicación de estos conocimientos recaen en tres agentes de la sociedad fundamentales desde mi punto de vista. En primer lugar, esta aplicación contribuye positivamente a una gestión de calidad de los recursos patrimoniales en las instituciones que custodian estos bienes, ya sean monumentos culturales y naturales, piezas artísticas o patrimonio inmaterial.  El  otro elemento beneficiado de esta aplicación, y  que es fundamental para generar una buena imagen de la institución,  es el público.  Y  por último,  el Patrimonio en sí mismo que es también beneficiado por este tipo de actividad divulgativa. Tras tanto seguimiento, teoría y experiencias reales que lo constatan[2],  es evidente a día de hoy que el manejo  con conocimiento de las técnicas de la Interpretación del Patrimonio es garantía de éxito y calidad en el ejercicio de la difusión y conservación de este. Esto se debe principalmente a que genera una consecuencia de procedimientos en el público que por lo general desemboca en un sentimiento de aprecio  y/o valoración de este hacia los elementos patrimoniales conocidos en su visita al lugar.

¿En qué consiste la Interpretación del Patrimonio?

Este cuerpo teórico que bebe de las fuentes de la psicología evolutiva, de las teorías básicas de comunicación y de los estilos de aprendizaje permite crear unos itinerarios y productos que generan experiencias relevantes para el público brindándole a este unos espacios o momentos excepcionales para la reflexión en torno al elemento a conocer.

Me gustaría reseñar para que quede clara la diferencia con otro tipo de visitas, que los itinerarios interpretativos siempre van a ser;  fáciles de comprender, fáciles de seguir, amenos, y relevantes para las personas. Y esta es su gran diferencia y peculiaridad.  Tal y como nos indicaba ya F. Tilden en el 1957; La interpretación no es instrucción, si no provocación. La interpretación  del patrimonio no se basa únicamente en la trasmisión de datos e información o en el puro entretenimiento , es más compleja y va mucho más allá para conseguir los objetivos mencionados, por ello es indispensable conocerla con detalle para poderla aplicar eficientemente en público no cautivo[i].

¿Qué objetivos persigue?

Tal como indica Olaia Fontal y Roser Calaf en su texto Metáforas para conceptualizar el Patrimonio Artístico y su enseñanza en los/las participantes, se genera concatenadamente en el público esta serie de procesos;  Conocer - Comprender - Respetar - Cuidar - Disfrutar – Trasmitir,  y cuyo fin último en la Interpretación del Patrimonio, es la conservación de este. O cómo bien  indica Sam H. Ham (2015);  La gente, no haría daño, a sabiendas, a aquello que le importa.

Además de este fin conservacionista de la Interpretación del Patrimonio, yo en este artículo quiero aportar otro objetivo o resultado fundamental de la aplicación de estas técnica y que no se suele tener en cuenta por las directivas de las instituciones tutoras del Patrimonio. Y responde así;  si el público está bien atendido, si a este se le responde a sus inquietudes en la visita y  si se va satisfecho por haber vivido un momento grato y desenfadado a la vez que enriquecedor en su tiempo libre, esto genera la mejor propaganda que la institución pueda ofrecer de sí misma y revierte inevitablemente en una mayor número de visitantes. Pero normalmente, la calidad de la atención a los y las visitantes no se suele tener en cuenta a la hora de gestionar estos espacios o instituciones. Generándose así en este país una gestión cultural mediocre por esta falta de atención. El personal que atiende al público es la cara más visible de los museos y sitios históricos o naturales, y normalmente el último colectivo o departamento a tener en cuenta y cuidar en la administración de estas instituciones.

A modo de conclusión, me gustaría animar  a  los y las profesionales  del mundo de la cultura  que no conocen esta disciplina a que se acerquen y profundicen en ella porque es sorprendente la de herramientas útiles que aporta al trabajo de la comunicación con el público y a la difusión del Patrimonio. Tradicionalmente en España es una disciplina que es utilizada más por los técnicos y técnicas de espacios naturales que por los profesionales de la cultura, por ello considero que nunca es tarde para abrirnos a este conocimiento y de esta manera implementar nuestro servicio a la comunidad.

En la Comunidad Autonomía de Andalucía podemos encontrar por ejemplo cursos específicos de alta calidad como el que realiza el IAPH[3] o la Sección de Historia del Arte del CDL de Sevilla y Huelva[4].


También es interesante visitar:

La Asociación para la Interpretación del Patrimonio
 http://www.interpretaciondelpatrimonio.com/

The National Park Service
 http://www.nps.gov/index.htm


Algunas publicaciones interesantes sobre la materia:

Tilden, Freman. Interpreting our Heritage.  The University of North Carolina Press, Chapell Hill. 1957.

Guerra, Francisco J. La interpretación: una herramienta para conocer el Patrimonio. Andalucía Ecológica. Año I. Número 2, pg. 32-33. Sevilla.

Morales, J. Guía práctica para la Interpretación del Patrimonio. Empresa Pública de Gestión de Programas Culturales. Consejería de Cultura. Junta de Andalucía. TRAGSA. Madrid . 1998.

Ham, Sam H. Interpretación para marcar la diferencia intencionadamente. Edita asociación para la Interpretación del Patrimonio. 2013.




[1] Morales, Jorge; Francisco Guerra; y Araceli Serantes. 2009. Bases para la Definición de Competencias en Interpretación del Patrimonio - Fundamentos teóricos y metodológicos para definir las Competencias Profesionales de Especialistas en Interpretación del Patrimonio en España. Seminario Permanente de Interpretación del Patrimonio, Centro Nacional de Educación Ambiental - CENEAM, España, 2009.
[2] Ham, Sam H. Interpretación para marcar la diferencia intencionadamente. 2013. Edita asociación para la Interpretación del Patrimonio.
[3] http://www.iaph.es/web/canales/formacion/cursos/index.jsp#listado
[4] http://www.cdlsevillayhuelva.org/formación/





[i] La terminología Público no cautivo se refiere a las personas que visitan estos espacios en su tiempo libre y no con un fin educativo o formativo, y suele ser denominado también como público general.

1 comentario:

José Ramón Terry dijo...

Buen artículo. Centrado en una profesión que continuará tomando fuerza en España por el valora que ha adquirido el patrimonio como turístico